jueves, 17 de septiembre de 2009

INVASIÓN DEL TAHUANTINSUYU POR LOS ESPAÑOLES

UNA GUERRA DINÁSTICA SUCETORIAL:

a) Un Imperio Dividido:
Cuando los conquistadores españoles llegaron al Perú, el país estaba inmerso en una sangrienta guerra civil. Atahualpa acababa de captura a Huáscar. Ejércitos de ambos bandos combatían aún en la región del Cuco. La reacción de los indios frente a los conquistadores dependió de su adhesión a una u otra de las facciones en disputa. Los primeros actos de Pizarro, al parecer, favorecieron a los partidarios de Huáscar. Para ellos el español era un salvador providencial. En su concepción: los huiracochas, hijos del “dios civilizador”, habían surgido súbitamente para castigar a Atahualpa y restablecer el legítimo orden. El cronista indio Titu Cusi Yupanqui describe aquellas características extrañas que señalaban a los españoles como entes divinos: la barba rubia o castaña, la ropa que les cubría todo el cuerpo, los caballos cuyos pies eran de plata, el lenguaje mágico que les permitía comunicarse entre sí por medio de pequeños trozos de telas blancas (la escritura), y el dominio del rayo (las armas de fuego).

b) La Guerra entre Huáscar y Atahualpa:

La historiadora María Rostworowski en su artículo “El enfrentamiento entre Huáscar y Atahualpa” analiza detenidamente las causas de este conflicto. Ella resalta la importancia de conocer nuestra historia entendiendo y revalorando la idiosincrasia andina. En su opinión, para comprender la controversia entre Huáscar y Atahualpa es necesario conocer las historias referentes a sus madres. La mayoría de los cronistas coinciden en señalar a Raura Occllo (que pertenecía a la panaca Capac Ayllu de Túpac Yupanqui) como la madre de Huáscar. Las controversia surgen con la madre de Atahualpa y su lugar de nacimiento. Par Cieza de León, según los orejones del Cusco, Atahualpa había nacido en el Cusco (era mayor que Huáscar) y su madre, Tupa Palla, pertenecía al linaje de Hurin Cusco. Sarmiento de Gamboa menciona que la madre de Atahualpa se llamó Tocto Coca y pertenecía la linaje de Pachacútec. Ambos cronistas coinciden en que Atahualpa nació en el Cusco. Esquivel y Navia narran los episodios finales del gobierno de Huayna Cápac y el origen norteño de la madre de Atahualpa; pero es Gracilazo de la vega el principal informante de su origen norteño. Gracilazo pertenecía por su madre al linaje de Túpac Yupanqui, y por lo tanto a la misma panaca de Huáscar, por lo cual era su acérrimo partidario

Su odio a la persona y a la panaca de Atahualpa le hizo cambiar el curso de la historia sin tomar en consideración que el derecho del inca al poder se basaba en su habilidad. Como no pudo explicar la situación entre los hijos de Huayna Cápac, según las costumbres tradicionales del Viejo Mundo, y la importancia de la filiación materna, Gracilazo prefirió distorsionar su relato con la idea de acomodar la historia a los patrones europeos. Es decir, atribuyó a Huayna Cápac la división del Tahuantinsuyo al dejar el curacazgo de Quito bajo el control de Atahualpa y los demás estados de Huáscar.
c) El Punto de Vista Occidental:

Los cronistas dieron una explicación europea a la lucha entre los hermanos Huáscar y Atahualpa. Para ellos Huáscar, como primogénito, tenía todas las prerrogativas. Mientras que explicaron la rebeldía de Atahualpa como su derecho a reclamarse heredero de un reino de Quito. Bajo el punto de vista andino, los mismos sucesos se explican de otra forma. Entre los incas, el derecho de gobierno lo ejercía el hijo más capaz, no necesariamente el mayor. Aunque los cronistas aludieron a que el Inca tomaba como esposa a su “hermana”, esto debe entenderse como una joven perteneciente a su misma generación.


No hay comentarios: